Hola amigos de la ISTO!
Mi nombre es Erica Schenkel. Los saludo desde Argentina. Es para mí un gusto poder participar de esta primera semana de turismo social. Sin dudas nos encontramos atravesando un momento crítico, una crisis humanitaria con graves consecuencias económicas para nuestras sociedades, que afecta a todos los sectores, y, particularmente, al turismo.
Esta crisis también nos permitió y exigió reflexionar acerca de nuestras prácticas cotidianas. Y particularmente acerca del modelo turístico que viene conduciendo el desarrollo de la actividad desde hace tiempo, con graves consecuencias económicas, sociales y medioambientales. Y es en este marco que se nos presenta una oportunidad a todas aquellas personas que defendemos y estamos comprometidas con los principios del turismo social. Una oportunidad de posicionar al turismo social como un modelo alternativo y un modelo posible. Tenemos que aprovechar este marco para ir en la búsqueda de prácticas turísticas ambientalmente más responsables, pero también más equitativas en términos sociales.
En búsqueda de un turismo que se ocupe también por el disfrute del tiempo libre de los sectores postergados, que cargan con extensas jornadas laborales, ingresos insuficientes y escasas posibilidades recreativas a su disposición. Que se ocupe por la generación de ingresos justos para las comunidades de destino, con enclave local, por la generación de empleo de calidad, que no sea desigual ni en cuanto a raza, ni en cuanto a género, ni en cuanto a clase, ni condición migrante. Y sin dudas pensar en un turismo transformador, que forme y sensibilice acerca de esta necesidad de construir una nueva ética del turismo.
El turismo social debe ocupar un lugar central en estas discusiones. Y deseo que esta semana nos tenga abocados a darle tratamiento a cada una de estas problemáticas.